Limpiar ollas de aluminio quemadas puede ser una tarea tediosa y frustrante. Sin embargo, con este limpiador casero, puedes olvidarte de ese problema y dejar tus ollas brillando como nuevas. Este método no solo es efectivo, sino que también utiliza ingredientes que probablemente ya tienes en casa.
Este limpiador casero es ideal para diversas tareas del hogar. Con ingredientes fáciles de encontrar, puedes preparar un limpiador efectivo y económico que dejará tus superficies brillando. Sigue estos pasos para crear tu propio limpiador multiusos.
Ingredientes
- 1 Pastilla de jabón de glicerina (200 g)
- 2 cdas de Detergente en polvo
- 3/4 Taza de azúcar
- 2 litros de Agua hirviendo
- 150 ml de Detergente neutro
- 1 cda de Sal
- 1 cda de Bicarbonato de sodio
- Colorante alimentario (opcional)
Procedimiento
- Preparación del Jabón: Comienza rallando la pastilla de jabón de glicerina en un recipiente grande. Este paso facilitará la disolución del jabón en el agua.
- Disolución en Agua Hirviendo: Agrega los 2 litros de agua hirviendo al recipiente con el jabón rallado. Revuelve bien hasta que el jabón se disuelva por completo, formando una mezcla homogénea.
- Incorporación de Ingredientes Secos: Añade las 2 cucharadas de detergente en polvo, la 3/4 taza de azúcar, la cucharada de sal y la cucharada de bicarbonato de sodio. Estos ingredientes potenciarán el poder de limpieza y ayudarán a suavizar el agua, mejorando la eficacia del limpiador.
- Añadir el Detergente Neutro: Incorpora los 150 ml de detergente neutro a la mezcla. Este detergente aportará una acción desengrasante y hará que el limpiador sea adecuado para múltiples superficies.
- Opcional: Colorante Alimentario: Si deseas darle un toque personal a tu limpiador, puedes añadir unas gotas de colorante alimentario de tu elección. Este paso es opcional y no afecta la eficacia del producto, pero puede hacer que sea más agradable visualmente.
- Reposo: Deja reposar la mezcla a temperatura ambiente hasta que enfríe por completo. Durante este tiempo, la mezcla se espesará ligeramente, creando una consistencia ideal para la limpieza.
- Almacenamiento: Una vez que la mezcla esté fría, vierte el limpiador casero en botellas o frascos con tapa. Asegúrate de etiquetar los frascos para evitar confusiones.
También te sugerimos: El truco para dejar como nuevos los paños de cocina en 20 minutos (sin frotar y sin lavadora)
Consejos Adicionales:
- Agitar Antes de Usar: Antes de cada uso, agita bien el frasco para asegurarte de que todos los ingredientes estén bien mezclados.
- Prueba en Pequeñas Áreas: Si vas a utilizar este limpiador en superficies delicadas o nuevas, es recomendable probarlo primero en un área pequeña y poco visible para asegurarte de que no cause daños.
- Aplicaciones Variadas: Este limpiador es versátil y puede ser utilizado en superficies como encimeras, baños, azulejos y hasta en la cocina. Sin embargo, evita usarlo en superficies de madera sin tratar o en mármol.
- Conservación: Mantén el limpiador en un lugar fresco y seco, alejado de la luz directa del sol para prolongar su vida útil.
Con este limpiador casero, no solo ahorrarás dinero, sino que también tendrás un producto efectivo y libre de químicos agresivos.
¡Pruébalo y verás los resultados!