Bollos alemanes para el desayuno, los horneo 3 veces por semana… ¡tan deliciosos!

Los Bollos alemanes para el desayuno son una opción deliciosa y sencilla que destaca por su masa esponjosa y su relleno dulce. Se preparan con una masa de levadura que se rellena con mermelada o Nutella antes de freírse en aceite caliente. Estas pequeñas delicias son crujientes por fuera y suaves y jugosas por dentro.

Son perfectas para calmar el hambre matutino o como un toque dulce acompañado de una taza de café o té. Son especialmente populares tanto entre niños como adultos. Su preparación es sencilla y permiten hacer grandes cantidades rápidamente, lo que los convierte en una excelente opción para compartir con la familia o amigos.

¡Pruébalos y lleva el aroma de pan recién horneado a tu cocina! ¡Buen provecho y disfruta horneando!

Ingredientes

  • 500 g de harina de trigo (tipo 550)
  • 40 g de levadura
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 cucharadita de sal
  • 150 ml de leche
  • 150 ml de agua (aproximadamente según necesidad)
  • 10 g de mantequilla (manteca)

Preparación

  1. Mezclar todos los ingredientes para formar una masa de levadura y amasar bien hasta que se despegue del bowl. Dejar reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 30 minutos hasta que la masa haya duplicado su volumen.
  2. Amasar bien sobre una superficie enharinada, doblarla varias veces y formar un rollo. Cortar el rollo en aproximadamente 15 piezas del mismo tamaño y darles forma de panecillos alargados (tipo baguette).
  3. Colocar los panecillos en una bandeja de horno forrada con papel de hornear. Dejar reposar brevemente y luego pincelar con agua.
  4. Hornear en la rejilla del medio a 240 °C durante 15 a 20 minutos.

 

También te sugerimos: ¡El pan de desayuno más delicioso que he hecho jamás!

Consejos Adicionales:

  • Para un extra de sabor, puedes espolvorear un poco de azúcar glas (impalpable) sobre los bollos una vez horneados.
  • Si prefieres una textura más esponjosa, puedes agregar una cucharada de miel a la mezcla.
  • Para un toque especial, puedes rellenarlos con crema pastelera o chocolate derretido en lugar de mermelada o Nutella.
  • Antes de cerrar el horno, vierte una taza de agua en su interior para generar vapor y lograr una corteza dorada y crujiente.
  • Si los deseas más suaves, cúbrelos con un paño húmedo al sacarlos del horno y déjalos enfriar lentamente.

¡Listo! ¡A disfrutarlo!