Pan Casero en Licuadora: Suave, Esponjoso y Listo en Pocos Pasos

¿Quién dijo que hacer pan en casa tiene que ser complicado? Esta receta de pan casero en licuadora es la solución perfecta para quienes buscan practicidad sin sacrificar sabor ni textura. Con ingredientes simples y sin necesidad de amasar, obtendrás unos pancitos dorados por fuera, suaves por dentro, y con ese irresistible aroma a pan recién hecho.

¿Por qué hacerlo en licuadora?

Usar la licuadora acelera el proceso y garantiza una masa bien mezclada y homogénea. Es ideal para principiantes o para esos días en los que el tiempo escasea pero el antojo manda.


🥣 Ingredientes

  • 2 huevos

  • 1 taza de leche tibia

  • 1/4 de taza de aceite

  • 2 cucharadas de azúcar

  • 1 cucharadita de sal

  • 1 sobre (10 g) de levadura seca

  • 3 ½ tazas de harina de trigo (aproximadamente)


👩‍🍳 Preparación paso a paso

1. Mezclar los ingredientes líquidos

Colocá en la licuadora los huevos, la leche tibia, el aceite, el azúcar, la sal y la levadura seca. Licuá por unos segundos hasta que la mezcla esté bien integrada.

2. Incorporar la harina

Verté la mezcla líquida en un bol y comenzá a agregar la harina de a poco, mezclando con una cuchara o espátula. Cuando ya no puedas mezclar más con la cuchara, usá tus manos hasta formar una masa suave, que no se pegue a los dedos. (También podés usar una batidora con gancho de amasado si lo preferís).

3. Dejar levar

Formá una bola con la masa, tapala con un repasador y dejala reposar durante 1 hora o hasta que duplique su tamaño.

4. Formar los pancitos

Una vez levada, dividí la masa en pequeñas porciones iguales y formá bolitas. Colocalas en una placa para horno previamente enmantecada o con papel manteca, dejando un poco de espacio entre cada una.

5. Segundo levado

Dejalas reposar nuevamente por 20 a 30 minutos. Esto les dará una textura aún más esponjosa.

6. Hornear

Llevá los pancitos a horno precalentado a 180 °C durante unos 20 a 25 minutos, o hasta que estén doraditos por encima.


✅ Consejos útiles

  • Podés pincelarlos con yema de huevo o manteca derretida antes de hornear para lograr un acabado más brillante.

  • Agregales queso rallado, hierbas o semillas si querés darles un toque especial.

  • Son perfectos para sandwiches, picadas o para acompañar el mate.


Estos pancitos caseros hechos en licuadora no solo son fáciles de preparar, sino que también conquistan a todos por su textura y sabor. Una receta ideal para compartir en familia y disfrutar del pan recién horneado sin complicaciones. ¡Probala y sorprendete!