¡No cocines patatas hasta que veas que esta técnica conquista el mundo!

¿Buscás una comida rendidora, sabrosa y que se adapte a lo que tenés en la heladera? Este pastel de papas y vegetales al horno es la solución perfecta. Una receta liviana, ideal para días frescos o cuando querés comer rico sin complicarte. No lleva carne, se puede personalizar y además es ideal para preparar en cantidad y guardar.

No se trata solo de mezclar ingredientes: con algunos trucos podés lograr una textura crocante por fuera, cremosa por dentro, y un aroma irresistible.


Ingredientes básicos

  • 3 papas medianas

  • 1 cebolla

  • 1 zanahoria

  • 1 pimiento (rojo o verde)

  • 3 huevos

  • 1 taza de leche

  • 200 g de harina integral (o común)

  • 2 cucharaditas de polvo de hornear

  • 150 g de queso rallado

  • Sal, pimienta y aceite de oliva

  • Cebollita de verdeo o perejil (opcional)


Paso a paso

1. Prepará la base

  • Pelá y rallá las papas.

  • Picá la cebolla y rallá la zanahoria.

  • Cortá el pimiento en cubitos.

En una sartén con un chorrito de aceite de oliva, salteá todo junto por unos minutos hasta que las verduras estén tiernas. Salpimentá a gusto.

Tip: exprimí bien las papas antes de saltearlas para evitar que larguen mucha agua en el horno.


2. Armá la mezcla

  • En un bol, batí los huevos con la leche.

  • Agregá la harina mezclada con el polvo de hornear.

  • Sumá las verduras salteadas y mezclá hasta que quede una masa espesa.

Dejá reposar unos 15 minutos mientras precalentás el horno a 200 °C.


3. Al horno

  • Engrasá una fuente para horno.

  • Volcá la mezcla y emparejá bien la superficie.

  • Horneá durante 40–45 minutos hasta que se vea firme y dorado.


4. Toque final

  • Sacá la fuente del horno, espolvoreá el queso por encima y volvé a hornear 10–15 minutos más hasta que se derrita y burbujee.

  • Opcional: agregá un poco de orégano o ají molido para un sabor extra.


¿Con qué lo podés acompañar?

  • Con una ensalada fresca de rúcula y tomate.

  • Con una salsa de yogur natural con limón y ajo.

  • Con una sopa de entrada en días más fríos.


Ideas para variar

  • Agregale trocitos de calabaza, espinaca, choclo o lo que tengas en la heladera.

  • Si querés hacerlo más potente, podés sumarle atún desmenuzado o trocitos de pollo cocido.

  • Probalo con distintos quesos: mozzarella, gruyere, reggianito o una mezcla.


Consejos y recomendaciones

  • No te saltees el reposo: dejar que la mezcla repose antes de hornear ayuda a que se integren bien los sabores y la masa tome cuerpo.

  • Usá molde antiadherente o papel manteca si tu fuente suele pegarse. Así evitás que se rompa al desmoldar.

  • Si querés una versión sin gluten, usá harina de arroz o mezcla apta.

  • Para una opción vegana, podés reemplazar los huevos con mezcla de lino o puré de papas, y el queso por levadura nutricional o queso vegano.

  • Usalo como base para tartas: con esta mezcla podés hacer mini tartitas, muffins salados o rellenar empanadas.


Conclusión

Este pastel de papas y verduras es mucho más que una receta fácil. Es una opción sabrosa, saludable y adaptable, ideal para resolver comidas sin caer en lo mismo de siempre. Te permite usar lo que tenés en casa, incorporar más vegetales y disfrutar de una comida casera que rinde y alimenta.

Animate a probarla, personalizala a tu gusto y hacela parte de tu recetario semanal. Y lo mejor: se puede guardar, recalentar y sigue igual de rica. Perfecta para quienes aman comer bien sin complicarse.