El ingrediente que ayudará a que tu potus crezca y se llene de hojas.

El potus (Epipremnum aureum), también conocido como potos o pothos, es una de las plantas de interior más queridas en los hogares argentinos por su capacidad de adaptarse a distintos ambientes y su bajo mantenimiento. Pero si querés que no solo sobreviva sino que estalle de hojas y se vea radiante, hay un ingrediente económico y natural que puede marcar la diferencia: el plátano.

Beneficios del plátano para el potus

El plátano es una fuente riquísima de potasio y fósforo, nutrientes fundamentales para el desarrollo vegetal. El potasio ayuda a fortalecer los tallos y fomenta la aparición de nuevas hojas, mientras que el fósforo estimula el crecimiento de las raíces. Además, la cáscara de plátano contiene calcio y magnesio, dos minerales que mejoran la fotosíntesis y favorecen un follaje más verde y saludable.

También tiene azúcares naturales que pueden beneficiar a los microorganismos del sustrato, mejorando la calidad del suelo y, en consecuencia, la salud general de la planta. Esto lo convierte en un abono casero multifunción.

Formas de usar el plátano en el cuidado del potus

1. Infusión de cáscara de plátano: Cortá cáscaras en trozos y dejalas en agua durante 24 horas. Usá ese líquido para regar tu potus una vez por semana. Es una especie de «té nutritivo» para la planta. Es ideal para épocas de crecimiento, como primavera o verano.

2. Cáscara picada en el sustrato: Picar la cáscara en partes pequeñas y mezclarlas con la tierra. Se irá descomponiendo y liberará nutrientes de forma progresiva. Puede actuar como un fertilizante de liberación lenta y también mejora la estructura del suelo.

3. Puré de plátano: Pisá un plátano maduro y mezclalo con un poco de agua. Sumalo al sustrato. No sólo aporta minerales, sino que mejora la retención de humedad en la tierra. También podés mezclarlo con compost o humus de lombriz para potenciar sus efectos.

4. Compost con cáscaras de plátano: Si tenés compostera, agregá las cáscaras ahí. En unas semanas, tendrás un abono más completo que podés usar en el potus y otras plantas.

Consejos extra para que tu potus esté espectacular

  • Buena luz, sin sol directo: Lo ideal es un rincón iluminado pero sin que el sol le pegue de lleno. El exceso de sombra puede hacer que se alargue demasiado y pierda hojas.
  • Riego moderado: Solo cuando la tierra esté seca al tacto. No te pases con el agua porque se pueden pudrir las raíces. Si usás macetas sin drenaje, asegurate de regar muy poco.
  • Drenaje efectivo: Usá una maceta con agujeros en la base y colocale piedras o arcilla expandida abajo para que el agua no se acumule.
  • Limpieza de hojas: Pasales un trapito húmedo de vez en cuando para sacarles el polvo y que puedan absorber mejor la luz. También previene plagas.
  • Poda suave: Si ves hojas secas o tallos largos sin hojas, cortalos. Esto estimula el crecimiento lateral y hace que la planta se vea más tupida.
  • Tutor o guía: Si tu potus empieza a colgar mucho, podés guiarlo con un tutor o hacerlo trepar por una pared o estante. Esto también estimula el desarrollo de hojas más grandes.

Conclusión

Con estos tips y el aporte del plátano, tu potus no solo va a sobrevivir, sino que va a crecer con fuerza y belleza. Un recurso natural, accesible y sustentable para tener una planta sana que llene tu casa de verde. Animate a probarlo y contá los resultados. Podés hacer una rutina mensual con estos métodos para mantener a tu potus siempre nutrido y vistoso.