Preparar pan en casa es una experiencia que conquista todos los sentidos: el aroma mientras se hornea, la textura de una miga suave y el sabor inconfundible de lo hecho en casa. Y todo empieza con una buena masa. En este artículo te enseñamos cómo hacer una masa básica para pan casero, ideal para quienes desean lograr panes tiernos, sabrosos y con una textura espectacular.
🥖 Ingredientes necesarios
Para preparar esta masa base, necesitás lo siguiente:
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600 g de harina de trigo
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400 ml de leche tibia
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4 cucharadas de azúcar
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1 cucharadita de polvo de hornear
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50 g de mantequilla
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1 cucharada de mantequilla adicional (posiblemente para engrasar o untar)
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1 cucharada de sal
👩🍳 Paso a paso para preparar la masa
1. Activar los ingredientes
En un bol grande, verté la leche tibia y disolvé el azúcar junto con el polvo de hornear. Esta mezcla dará una textura más aireada y esponjosa a la masa.
2. Agregar la harina y la sal
Incorporá de a poco la harina tamizada junto con la sal. Mezclá con una cuchara de madera o directamente con las manos hasta que se forme una masa homogénea.
3. Integrar la mantequilla
Agregá los 50 g de mantequilla ablandada (a temperatura ambiente) y amasá bien hasta que la masa se vuelva suave, lisa y elástica. Si es necesario, espolvoreá un poco más de harina en la superficie de trabajo para evitar que se pegue.
4. Primer levado
Formá una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente engrasado (podés usar la cucharada de mantequilla adicional para esto). Tapá con un paño limpio y dejá reposar en un lugar cálido durante 1 a 1,5 horas, o hasta que la masa duplique su tamaño.
5. Lista para usar
Una vez levada, la masa está lista para que la utilices como base para distintos tipos de pan: panecillos, trenzas, bollos dulces, pan de molde, etc. Solo tenés que darle forma, dejar levar nuevamente y hornear según la receta elegida.
🧂 Consejos útiles
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Si querés una versión más saludable, podés reemplazar parte de la harina blanca por harina integral.
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Podés aromatizar la masa con hierbas, ajo en polvo o queso rallado para hacer panes saborizados.
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Si la masa queda muy pegajosa, agregá harina de a poco; si está muy seca, un chorrito de leche.
Con esta receta de masa básica, lograrás panes caseros tan buenos que nadie creerá que fueron hechos en tu cocina. Es sencilla, versátil y perfecta para principiantes o amantes de la panadería. ¡Animate a probarla y disfrutá del placer de hornear tu propio pan!