Así debes usar bicarbonato para combatir las plagas

El bicarbonato de sodio, ese polvo blanco que todos tenemos en casa, es mucho más que un ingrediente de cocina. En el ámbito del hogar y el jardín, se ha ganado un lugar como remedio natural multifacético para eliminar plagas, tratar hongos y proteger las plantas sin recurrir a productos químicos agresivos.

Sus propiedades alcalinas y ligeramente abrasivas lo convierten en un excelente aliado para combatir organismos indeseables de forma económica, segura y ecológica.

Ya sea que estés luchando contra hormigas en la cocina, cucarachas en rincones oscuros o enfermedades fúngicas en tus plantas, el bicarbonato de sodio puede ser la respuesta que necesitas.

En este artículo te explicamos cómo usarlo correctamente, manteniendo los ingredientes originales y sumando consejos prácticos para maximizar su eficacia.

Usos principales del bicarbonato de sodio en el control de plagas

Fungicida natural para plantas:

  • Mezcla una cucharadita de bicarbonato de sodio con unas gotas de jabón líquido natural en un litro de agua.

  • Coloca la mezcla en un pulverizador y rocía sobre hojas afectadas por hongos como el mildiú polvoriento.

  • Aplícalo durante la mañana o al atardecer para evitar daños por el sol.

Repelente de hormigas y babosas:

  • Espolvorea bicarbonato alrededor de las plantas o en senderos por donde transitan las hormigas.

  • En el caso de babosas, forma una barrera circular alrededor de la planta.

Trampa para cucarachas:

  • Mezcla bicarbonato de sodio y azúcar en partes iguales.

  • Coloca pequeñas cantidades en tapas de botella o directamente en rincones oscuros.

Endulzador de tomates:

  • Coloca una pequeña cantidad de bicarbonato en la base de la planta de tomate para reducir la acidez del suelo.

  • Esto puede contribuir a obtener frutos más dulces.

Herbicida casero:

  • Espolvorea bicarbonato sobre malas hierbas que crecen entre las baldosas o en caminos.

  • El bicarbonato ayuda a deshidratarlas y reducir su crecimiento.

Consejos adicionales para un uso más efectivo:

  • Usa agua tibia en las mezclas: mejora la disolución del bicarbonato y su adhesión a las hojas.

  • Alterna tratamientos: no uses bicarbonato de forma continua, alterna con otros métodos naturales para evitar resistencia.

  • Evita usar en plantas jóvenes o delicadas: en concentraciones altas, puede causar daños en tejidos tiernos.

  • Combínalo con aceites esenciales: como el de neem o menta, para potenciar el efecto repelente.

  • Aplica tras la lluvia: si ha llovido recientemente, espera a que las hojas estén secas antes de aplicar el producto.

  • Mantén el producto seco: almacena el bicarbonato en un lugar seco para conservar su efectividad.

  • Etiqueta tus mezclas caseras: anota fecha y composición para asegurar una correcta reutilización y evitar confusiones.

Este remedio casero destaca no solo por su simplicidad y bajo costo, sino también por su bajo impacto ambiental. ¡Al incorporar el bicarbonato de sodio en tus rutinas de cuidado del hogar o el jardín, contribuyes a crear un entorno más saludable para tu familia y para el planeta!