¡Solo añade carne molida a las patatas! ¡Receta sencilla para la cena!

Si buscas una receta sencilla, sabrosa y perfecta para una cena rápida, esta combinación de patatas y carne molida es ideal. La mezcla de sabores de las especias, la suavidad de las patatas y la textura dorada del queso (si decides añadirlo) hacen de este plato una opción reconfortante y deliciosa.

Además, es fácil de preparar con ingredientes básicos que probablemente ya tengas en casa. A continuación, se describe esta exquisita receta:

Ingredientes

  • 4-5 patatas peladas y cortadas en rodajas
  • Aceite de oliva para sazonar
  • Sal y pimienta negra al gusto
  • 1/2 cucharadita de pimentón dulce
  • 450 g de carne molida
  • 1 cebolla picada
  • 1/2 cucharadita de orégano
  • 250 g de tomates triturados
  • Opcional: queso mozzarella rallado

Preparación

  1. Precalienta el horno a 200°C.
  2. Coloca las patatas en una bandeja, sazona con aceite de oliva, sal, pimienta y pimentón. Hornea durante 20 minutos.
  3. En una sartén, sofríe la cebolla hasta que esté dorada. Añade la carne y cocina hasta que se dore.
  4. Incorpora los tomates triturados, orégano y pimentón. Cocina a fuego lento durante 10 minutos.
  5. Coloca la mezcla de carne sobre las patatas horneadas. Si deseas, añade queso rallado.
  6. Hornea durante 10 minutos adicionales hasta que el queso se derrita y se dore.

 

Consejos adicionales:

  • Para un toque extra de sabor, agrega ajo picado y una pizca de comino a la carne.
  • Si deseas un acabado crujiente, gratina con el horno en modo grill durante los últimos 2 minutos.
  • Para una versión más ligera, sustituye la carne molida por carne de pavo o pollo.
  • Añade verduras: Si deseas hacer el plato más nutritivo, incorpora pimientos, calabacín o espinacas a la mezcla de carne.
  • Usa caldo en lugar de aceite: Si prefieres un sabor más suave y menos aceitoso, puedes sustituir el aceite de oliva por caldo de pollo o de carne para cocinar las patatas.
  • Varía las especias: Si quieres darle un toque diferente, prueba con una pizca de curry, tomillo o romero.
  • Patatas más crujientes: Si prefieres las patatas más crujientes, déjalas en remojo en agua fría durante 30 minutos antes de hornearlas y sécalas bien antes de sazonar.
  • Sustituye el queso: Si no tienes mozzarella, puedes usar queso cheddar, gouda o incluso queso de cabra para un sabor más intenso.