¡Leche condensada batida con duraznos! ¡El mejor postre casero sin horno! ¡Todos lo quieren!

Cuando se trata de postres fáciles y deliciosos, esta receta de durazno con leche condensada es una joya que no puede faltar en tu repertorio. Con pocos ingredientes y sin necesidad de horno, puedes preparar un dulce refrescante que encantará a toda la familia.

Su textura suave, sabor afrutado y presentación colorida lo convierten en la estrella de cualquier mesa. Ideal para días calurosos, celebraciones improvisadas o simplemente para darte un gusto en casa, este postre se prepara en apenas 5 minutos y se deja enfriar en el refrigerador.

Lo mejor: no se necesita ninguna técnica complicada, y el resultado es impresionante. Además, podrás seguir cada paso de la preparación en el siguiente vídeo del canal de Schöne desserts:

Ingredientes

  • 500 g de duraznos enlatados (escurridos)

  • 150 ml de leche condensada

  • 300 g de queso crema

  • 450 ml de leche

  • 100 g de azúcar

  • 100 ml de agua

  • 30 g de gelatina sin sabor

  • Unas gotas de colorante alimentario (opcional)

  • Un poco más de agua (para ayudar en el licuado si es necesario)

Preparación paso a paso

1. Preparar la gelatina

  • Disuelve los 30 g de gelatina en 100 ml de agua.

  • Lleva al microondas durante unos 20–30 segundos hasta que esté completamente disuelta. Reserva.

2. Licuar la mezcla

  • En una licuadora, coloca los duraznos escurridos, el queso crema, la leche, la leche condensada, el azúcar y el colorante (si usas).

  • Licúa hasta obtener una mezcla completamente homogénea. Si queda muy espesa, podés añadir un poco de agua para ajustar la textura.

3. Incorporar la gelatina

  • Con la licuadora en marcha a baja velocidad, añade la gelatina derretida en hilo fino para integrarla de manera uniforme.

4. Verter y enfriar

  • Vierte la mezcla en un molde grande o en recipientes individuales.

  • Lleva al frigorífico por al menos 5 horas o hasta que cuaje completamente.

5. Servir

  • Desmolda o sirve directamente en los recipientes.

  • Si querés, decorar con trozos de durazno, hojas de menta o crema batida.

Consejos adicionales

Mejora la presentación

  • Si usas un molde de silicona, el desmolde será más fácil y lucirá más prolijo.

  • Podes colocar rodajas de durazno en la base del molde antes de verter la mezcla para una decoración natural al desmoldar.

¿No tenes queso crema?

  • Podes reemplazarlo por ricota bien procesada o yogur griego espeso. Le dará una textura diferente, pero igualmente deliciosa.

Ajustes de sabor

  • Agrega una cucharadita de esencia de vainilla o ralladura de limón para potenciar el sabor.

Variante sin azúcar refinada

  • Si querés reducir el azúcar, elimina el azúcar adicional y usa leche condensada reducida en azúcar. También podés usar un edulcorante natural como la stevia (en proporción adecuada).

Ideal para toda ocasión

Este postre no solo es ideal para un antojo rápido, sino también perfecto para cumpleaños, meriendas familiares o reuniones especiales. Su sabor a fruta con cremosidad lo hace irresistible tanto para niños como adultos.

No olvides guardarlo en el refrigerador y consumirlo en un máximo de 3 días para disfrutar su mejor textura y sabor.