Las croquetas de jamón y queso son una receta clásica que nunca pasa de moda. Estas pequeñas delicias, con un interior suave y cremoso y una cobertura dorada y crujiente, son perfectas para disfrutar en cualquier ocasión: ya sea como aperitivo, acompañamiento o incluso como plato principal.
¿Te gustaría aprender a prepararlas en casa de manera fácil y con un resultado espectacular? A continuación, te compartimos una receta mejorada, con trucos y consejos para que tus croquetas sean un éxito rotundo.
Ingredientes
Para preparar unas croquetas irresistibles, necesitarás:
Para la masa:
- 1,2 kg de papas (variedad harinosa, como las papas blancas)
- 2 yemas de huevo
- 150 g de queso Parmesano rallado
- 70 g de manteca (mantequilla)
- 1 cucharadita de mostaza picante (puedes usar mostaza suave si prefieres un sabor más suave)
- 2 cucharadas de cebollinos o verde de cebolla de verdeo, finamente picados
- 70 g de jamón cocido, cortado en cubos pequeños
- Sal y pimienta al gusto
- Nuez moscada molida (opcional, pero altamente recomendada para un toque especial)
Para el rebozado:
- 1 huevo batido
- 8 cucharadas de harina
- 10 cucharadas de pan rallado
- Aceite para freír (preferiblemente de girasol o maíz)
- Harina adicional para trabajar la masa
Preparación Paso a Paso
1. Cocina las papas
- Pela las papas y colócalas en una olla con agua y sal.
- Cocina a fuego medio durante aproximadamente 30 minutos, o hasta que las papas estén bien tiernas.
- Escurre el agua y pásalas por un pasapurés o pisa puré. Es importante que el puré quede bien seco para evitar que la masa sea demasiado húmeda.
Consejo: Si no tienes un pasapurés, utiliza un tenedor o pisa papas, pero asegúrate de que no queden grumos.
2. Prepara la masa
- Añade las yemas de huevo, la manteca, sal, pimienta y un toque de nuez moscada al puré de papas.
- Incorpora el queso Parmesano rallado, la mostaza y los cebollinos picados.
- Agrega el jamón cortado en cubos pequeños y mezcla bien hasta que todos los ingredientes estén integrados.
Consejo: Si la masa queda demasiado pegajosa, agrega una o dos cucharadas de harina para trabajarla mejor.
3. Forma las croquetas
- Con las manos ligeramente enharinadas, toma pequeñas porciones de masa y forma bolitas del tamaño de una nuez.
- Pasa cada bolita por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado.
Truco: Para un rebozado más crujiente, realiza un doble empanado. Es decir, después de pasar las croquetas por pan rallado, repite el proceso de huevo y pan rallado.
4. Fríe las croquetas
- Calienta suficiente aceite en una sartén profunda o cacerola. El aceite debe estar bien caliente, a unos 180°C, para evitar que las croquetas absorban demasiado aceite.
- Fríe las croquetas en tandas pequeñas durante 4-5 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes por fuera.
- Retira las croquetas con una espumadera y colócalas sobre papel de cocina para eliminar el exceso de aceite.
Consejos para unas Croquetas Perfectas
- Elige bien las papas: Las papas harinosas, como las papas blancas o russet, son ideales para esta receta porque contienen menos agua y garantizan una masa más firme.
- Utiliza queso de calidad: El queso Parmesano aporta un sabor delicioso, pero también puedes probar con otros quesos como el Gouda, Provolone o incluso Mozzarella para una textura más elástica.
- No sobrecargues la sartén: Fríe las croquetas en tandas pequeñas para que el aceite no pierda temperatura y las croquetas se cocinen de manera uniforme.
- Congela para tener siempre a mano: Si haces muchas croquetas, congélalas antes de freírlas. Cuando las necesites, fríelas directamente sin descongelar.
Variaciones de la Receta
¿Quieres experimentar? Aquí te dejamos algunas ideas para personalizar tus croquetas:
- Croquetas de pollo y queso: Sustituye el jamón por pollo desmenuzado.
- Croquetas de espinaca y ricota: Ideal para quienes prefieren una opción vegetariana.
- Croquetas de pescado: Prueba añadir atún o merluza desmenuzada para un toque diferente.
¿Con Qué Acompañarlas?
Las croquetas de jamón y queso son tan versátiles que pueden acompañarse con múltiples opciones:
- Salsas caseras: Como alioli, salsa tártara o una simple mayonesa casera.
- Ensaladas frescas: Una ensalada de rúcula, tomates cherry y queso parmesano es la combinación perfecta.
- Vinos y cervezas: Si las sirves como aperitivo, acompáñalas con una copa de vino blanco o una cerveza artesanal bien fría.
Las croquetas de jamón y queso son una receta clásica que nunca falla. Con los ingredientes adecuados y algunos consejos prácticos, puedes lograr unas croquetas caseras irresistibles, crujientes por fuera y cremosas por dentro.
Anímate a prepararlas y sorprende a tu familia con este bocado delicioso. ¡Buen provecho!