Los huevos Monachina son una joya de la cocina tradicional napolitana. Se trata de una preparación sencilla pero sofisticada, que combina ingredientes básicos con una técnica que transforma unos simples huevos duros en un bocado gourmet. El secreto está en el contraste de texturas: una capa crujiente y dorada por fuera, y un corazón suave y cremoso en su interior.
Tradicionalmente servidos en Pascua como aperitivo festivo, hoy en día se disfrutan en cualquier ocasión especial.
Ingredientes
Para los huevos:
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6 huevos
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500 ml de aceite de semilla de maní (para freír)
Para la salsa bechamel:
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200 ml de leche
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20 g de harina
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20 g de manteca
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Sal y nuez moscada a gusto
Para el empanizado:
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2 huevos batidos
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Harina (cantidad necesaria)
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Migas de pan (cantidad necesaria)
Preparación paso a paso
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Herví los huevos
Cociná los huevos en agua hirviendo durante 10 minutos. Luego pasalos a un recipiente con agua fría para detener la cocción. Pelalos y dejalos enfriar completamente. -
Prepará la salsa bechamel
En una cacerola, derretí la manteca a fuego bajo. Agregá la harina y cociná durante 1 minuto, revolviendo constantemente. Sumá la leche de a poco sin dejar de batir, hasta lograr una crema espesa y sin grumos. Condimentá con sal y una pizca de nuez moscada. Retirá del fuego y dejá entibiar. -
Armá el relleno
Cortá los huevos duros a la mitad y retirales con cuidado las yemas. Tamizá las yemas con un colador o pisalas con un tenedor. Mezclalas con la bechamel hasta obtener una pasta cremosa. Podés enriquecerla con queso parmesano rallado, atún desmenuzado o alcaparras picadas si querés una versión más sabrosa. -
Rellená los huevos
Tomá las mitades de clara cocida y rellenalas con la mezcla. Juntá dos mitades para formar nuevamente un huevo entero. -
Empanado doble para más crocancia
Pasá cada huevo por harina, luego por huevo batido y finalmente por pan rallado. Para una cobertura más firme y dorada, repetí el empanado: huevo batido y pan rallado nuevamente. -
Freí los huevos
Calentá el aceite de maní en una cacerola profunda. Cuando esté bien caliente (pero sin humear), freí los huevos de a poco hasta que estén dorados y crujientes. Escurrilos sobre papel absorbente.
Consejos y recomendaciones
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Usá huevos a temperatura ambiente para evitar que se quiebren al hervir.
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No cocines demasiado la bechamel, debe quedar espesa pero no sólida. Esto permite que el relleno mantenga su textura suave.
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No frías más de dos huevos por tanda, así la temperatura del aceite no baja y el rebozado queda parejo.
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Servilos de inmediato para que mantengan su exterior crocante. No se recomienda guardarlos ni recalentarlos.
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Presentalos con una guarnición fresca, como hojas verdes con limón o una ensalada de tomates cherry.
Conclusión
Los huevos Monachina son una muestra perfecta de cómo transformar ingredientes simples en un plato refinado, lleno de sabor y con un resultado sorprendente. Esta receta combina tradición e ingenio culinario, y es ideal para lucirse en una reunión familiar o como entrada en una celebración. Con su relleno suave y su cobertura dorada, no dejarán a nadie indiferente. Preparalos una vez y seguro los volverás a hacer.