Cómo eliminar el sarro, combatir la gingivitis y blanquear tus dientes con un truco natural: Consejos prácticos y advertencias

Este método casero puede ser útil para reducir la acumulación de sarro y mejorar la apariencia de tus dientes. Sin embargo, debe complementarse con visitas regulares al odontólogo.

Ingredientes necesarios:

  • 1 cucharada de bicarbonato de sodio.
  • ½ cucharadita de sal.
  • ½ taza de agua oxigenada.
  • ½ taza de agua tibia.
  • Enjuague bucal.
  • Hilo dental.
  • Cepillo de dientes limpio.

Pasos a seguir:

  1. Mezcla bicarbonato de sodio y sal:
    • Combina ambos ingredientes en un recipiente pequeño.
    • Humedece el cepillo de dientes y aplícale la mezcla. Cepilla tus dientes durante 5 minutos, asegurándote de cubrir todas las superficies de los dientes con movimientos suaves y circulares.
  2. Enjuague con agua oxigenada y agua tibia:
    • Mezcla partes iguales de agua oxigenada y agua tibia.
    • Enjuaga tu boca con esta solución durante 1 minuto. No la tragues bajo ninguna circunstancia.
    • Después, enjuaga nuevamente tu boca con agua fría para eliminar cualquier residuo.
  3. Uso del hilo dental:
    • Frota suavemente entre los dientes para eliminar cualquier resto de sarro o placa acumulada en las áreas de difícil acceso.
  4. Aplica enjuague bucal:
    • Completa el proceso con tu enjuague bucal habitual para eliminar bacterias y dejar una sensación de frescura.
  5. Frecuencia:
    • Realiza este tratamiento cada dos días, pero no más de dos semanas seguidas para evitar el desgaste del esmalte dental.

Consejos adicionales para un cuidado bucal óptimo:

  • Mantén una rutina diaria: Cepilla tus dientes después de cada comida durante al menos dos minutos, usando una pasta dental con flúor.
  • Cuida tu dieta: Reduce el consumo de azúcares y bebidas ácidas, ya que favorecen la formación de placa y sarro.
  • Hidratación: Beber suficiente agua ayuda a eliminar los restos de comida y bacterias de forma natural.
  • Cambia tu cepillo regularmente: Un cepillo desgastado es menos efectivo para limpiar los dientes.

Advertencias importantes:

Aunque este método natural puede ser útil para complementar tu rutina de higiene bucal, no sustituye las limpiezas dentales profesionales realizadas por un odontólogo. Si notas:

  • Sangrado constante en las encías.
  • Dolor o sensibilidad dental.
  • Pérdida de esmalte o manchas persistentes.

Consulta a un médico o dentista de inmediato. Un profesional podrá evaluar tu caso y ofrecerte un tratamiento adecuado, evitando complicaciones mayores.


El cuidado bucal es una parte fundamental de la salud general. Con esta receta natural y algunos cambios en tus hábitos diarios, puedes reducir el sarro y mejorar la apariencia de tus dientes. Sin embargo, la clave para una salud dental óptima siempre será una combinación de buenos hábitos, visitas regulares al odontólogo y una dieta equilibrada. ¡Tu sonrisa lo vale!