¡Este verano estos insectos estarán por todas partes! Si te pican, no ignores la picadura bajo ningún motivo

El verano trae consigo días más largos, calor y actividades al aire libre, pero también la aparición de visitantes inesperados que pueden poner en riesgo nuestra salud. Aunque poca gente los conoce, su población está creciendo y cada año se reportan más casos de personas afectadas por sus picaduras.

Estos insectos, conocidos como garrapatas babosas o insectos besuqueadores, no solo resultan molestos, sino que además pueden transmitir enfermedades graves. Conocerlos y aprender a prevenir su presencia es fundamental para protegernos a nosotros, a nuestra familia y a nuestras mascotas.

¿Qué son las garrapatas babosas?

Las garrapatas babosas, también llamadas “insectos besuqueadores”, tienen un comportamiento similar al de las sanguijuelas: se alimentan de sangre humana y animal. El verdadero peligro radica en que suelen defecar en el lugar de la picadura, transmitiendo parásitos que provocan esquistosomiasis, una enfermedad que puede avanzar silenciosamente y volverse mortal en casos graves.

Síntomas y riesgos para la salud

La esquistosomiasis puede manifestarse con síntomas como:

  • Dolores de cabeza.

  • Fiebre repentina.

  • Sarpullido o irritación en la piel.

  • Fatiga extrema.

  • Náuseas y vómitos.

Lo más alarmante es que muchas personas no presentan síntomas iniciales, lo que permite que la enfermedad avance y afecte órganos vitales como el corazón.

Por eso, ante cualquier picadura sospechosa, lo mejor es acudir al médico de inmediato y realizar un análisis de sangre, que puede detectar la enfermedad en una etapa temprana.

Hábitat y cómo prevenir su presencia

Estos insectos se encuentran en gran parte de Estados Unidos, aunque abundan especialmente en los estados del sur. Suelen esconderse en:

  • Jardines descuidados.

  • Plantas con exceso de humedad.

  • Rincones oscuros bajo los porches.

  • Incluso, en algunos casos, dentro de las casas.

Consejos prácticos para prevenirlos:

  • Mantener el jardín limpio, podando plantas y eliminando hojas secas.

  • Revisar y limpiar con frecuencia los alrededores de la casa.

  • Evitar acumular basura u objetos donde puedan esconderse.

  • Usar repelente en actividades al aire libre, especialmente si se vive en zonas de riesgo.

  • Revisar la piel y la de las mascotas después de estar en contacto con áreas verdes.

Vigilancia y concienciación

La presencia de garrapatas babosas no significa que debamos vivir con miedo o encerrados en casa, sino que es una señal para estar más atentos y preparados. Informarse, reconocer los riesgos y tomar medidas preventivas es la mejor forma de disfrutar del verano sin exponer nuestra salud.

Consejos adicionales

  • Educa a los niños sobre la importancia de no tocar insectos extraños.

  • Coloca mosquiteros o mallas en puertas y ventanas para reducir la entrada de plagas.

  • Consulta al veterinario sobre productos protectores para tus mascotas.

  • Si notas una picadura inusual que no cicatriza o que empeora, busca atención médica lo antes posible.