¡Mamá me enseñó! ¡Ahora quien lo prueba pide la receta! ¡Se come en un santiamén!

Hay recetas que se quedan grabadas en la memoria por su sabor, su simplicidad y la nostalgia que despiertan. Este pastel, heredado de la cocina de mamá, es uno de esos tesoros.

Con ingredientes sencillos y un paso a paso fácil, logra una combinación perfecta entre suavidad, cremosidad y un toque casero que conquista a cualquiera. Lo mejor de todo es que no necesitas ser un experto en repostería: en poco tiempo tendrás un postre que encantará a todos.

En esta versión completa y mejorada, además de la masa tradicional con mantequilla y yemas, se incorpora un delicioso relleno de requesón y crema agria, y se corona con un merengue ligero que se dora en el horno.

Ideal para una tarde con amigos, una celebración en familia o simplemente para darse un gusto en cualquier momento del día.

Además, podrás seguir el paso a paso, a través del siguiente vídeo del canal de SABINA foodee:

Ingredientes

Para la masa:

  • 300 g de harina de trigo

  • 200 g de mantequilla o manteca (a temperatura ambiente)

  • 1 cucharadita de polvo de hornear

  • 3 yemas de huevo

  • 4 cucharadas de crema agria

Para el relleno:

  • 400 g de requesón (o ricota suave)

  • 1 huevo

  • 100 g de azúcar

Para la cobertura:

  • 4 claras de huevo

  • 150 g de azúcar

Preparación paso a paso

1. Preparar la masa:

  1. En un bowl grande, bate la mantequilla con las yemas y la crema agria hasta obtener una mezcla homogénea.

  2. Agrega la harina tamizada junto con el polvo de hornear, mezclando con una espátula hasta formar una masa suave.

  3. Forma un bollo, envuélvelo en film transparente y llévalo al refrigerador durante 30 minutos.

2. Preparar el relleno:

  1. En otro bowl, mezcla el requesón con el huevo y los 100 g de azúcar.

  2. Remueve bien hasta obtener una crema uniforme.

3. Armar el pastel:

  1. Precalienta el horno a 180 °C.

  2. Extiende la masa en un molde enmantecado, cubriendo la base y los bordes.

  3. Vierte el relleno de requesón sobre la masa de manera uniforme.

4. Preparar la cobertura:

  1. Bate las claras a punto de nieve, agregando poco a poco los 150 g de azúcar hasta obtener un merengue firme y brillante.

  2. Cubre el pastel con este merengue, alisando con una espátula o haciendo picos decorativos.

5. Hornear:

  1. Lleva el pastel al horno y hornea durante aproximadamente 40–45 minutos, hasta que la cobertura esté dorada y el relleno firme.

  2. Deja enfriar completamente antes de desmoldar.

Consejos adicionales

  • Requesón: Si el requesón está muy grumoso, puedes pasarlo por un colador o licuarlo para obtener una textura más fina.

  • Toque cítrico: Agrega ralladura de limón o naranja al relleno para un sabor más fresco.

  • Masa crujiente: Para una base más firme, puedes precocinar la masa 10 minutos antes de colocar el relleno.

  • Decoración final: Una vez frío, puedes espolvorear con azúcar impalpable o decorar con frutas frescas.

Este pastel tiene todo lo que se espera de una receta casera: una base mantecosa que se deshace en la boca, un relleno suave y ligeramente dulce, y una cobertura de merengue que aporta ligereza y textura.

¡Una verdadera delicia que, como decía mamá, “quien lo prueba, pide la receta”!