Este pastel, conocido como el «Pastel de 4 Tazas,» es ideal para quienes buscan una receta rápida, sencilla y deliciosa. Su nombre proviene de la facilidad de medir los ingredientes principales, asegurando que cualquiera pueda hacerlo sin complicaciones.
El toque especial lo da el kéfir, que aporta un sabor único y una textura irresistible. Un pastel para disfrutar en cualquier momento del día, sin duda alguna, sorprenderás a los tuyos.
¡Manos a la obra!
Ingredientes
- 1 cda de Kéfir (puedes sustituirlo por yogur si no tienes kéfir a mano)
- 1 Taza de sémola
- 1 Taza de azúcar
- 1 Taza de leche
- 2 Huevos
- 50 g de Mantequilla derretida
- 150 g de Harina
- 100 g de Azúcar en polvo (para decorar)
- 1 Paquete de levadura en polvo (aproximadamente 10 g)
- Jugo de ½ limón
- Una pizca de sal
Preparación
- Preparar la base líquida: En un bowl grande, mezcla la leche, el kéfir y el jugo de limón. Deja reposar durante 5 minutos para que el ácido reaccione y la mezcla tome una textura cremosa.
- Mezclar los ingredientes húmedos: Agrega los huevos a la mezcla líquida y bate con un batidor manual hasta que quede homogéneo. Incorpora la mantequilla derretida.
- Combinar los ingredientes secos: En otro recipiente, mezcla la harina, la sémola, la levadura en polvo, el azúcar y una pizca de sal. Poco a poco, ve añadiendo estos ingredientes secos a la mezcla líquida, removiendo constantemente para evitar grumos.
- Hornear: Precalienta el horno a 180°C. Engrasa un molde para pastel y vierte la masa uniformemente. Hornea durante 30-35 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro salga limpio.
- Decorar: Una vez enfriado, espolvorea el azúcar en polvo sobre el pastel antes de servir.
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Consejos Adicionales:
- Variedad de sabores: Puedes añadir ralladura de limón o naranja para intensificar el sabor cítrico.
- Textura más esponjosa: Bate los huevos por separado y añádelos al final para un pastel más aireado.
- Sustituciones: Si no tienes kéfir, el yogur natural o incluso suero de leche son excelentes opciones.
- Conservación: Guarda el pastel en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta 3 días.
Este pastel es perfecto para acompañar con un café o té en la tarde, además de ser una excelente opción para sorprender a tus invitados sin complicarte. ¡Anímate a prepararlo y disfrutar de su delicioso sabor casero!